lunes, junio 23, 2008

Tres sombreros de copa

Señora, yo necesito saber
de este silencio,
de esta calma queda,
de esta paz árbol
que se extiende sigilosa
por esos recónditos rincones
donde la luz no llega.

Señora, yo necesito saber
de este estruendo,
de esta ruidosa tormenta,
de esta raíz estrepitosa
que se extiende ensordecedora
por esos recónditos rincones
donde la luz no llega.

Señora, yo necesito saber
de este no sé qué,
de este qué sé yo,
tan fragor y tan mutismo
que se extiende sin contención
por todos mis rincones
con una luz tan nueva.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Salva:(supongo que sabes quien soy ¿te dice algo el nombre: Dama Negra?)

Buenas noches.
Te escribo aquí por que seguro que lo lees ya que actualizas mucho.
Gracias por que hiciste algo bien, aunque guarramente, gracias por desaparecer a tiempo, a lo mejor si no hubieres desaparecido a tiempo no hubiera estado disponible yo en el momento preciso para descubrir al amor de mi vida, asi que me alegro un montón de que desaparecieres del todo, ahora tengo alguien que me dé ese cariño que buscaba y que parece que no te interesaba y solo fui un pequeño capricho sin importancia para tí, pero también podías haberlo hecho de un modo menos guarrero, más caballeroso y mejor hecho.
Bueno, pues ahí queda todo, adiós.